Introducción
Con más de diez millones de ejemplares vendidos en más de veinte idiomas, ¿De qué color es tu paracaídas? es el manual para buscar trabajo o cambiar de profesión más popular del mundo.
Este clásico, constantemente actualizado con información nueva, está pensado para identificar las habilidades en las que destacamos y encontrar el campo profesional en el que nos sintamos más a gusto.
Cómo encontrar la esperanza
Actualmente vivimos en un mundo donde las viejas normas se están reescribiendo. Cambian cosas que nunca creímos que podrían hacerlo. Ocurren cosas que jamás pensamos que llegaríamos a ver. Y cosas que dábamos por seguras —como un trabajo para toda la vida— ahora desaparecen.
Pero no hay dejarse arrastrar por la preocupación. Mientras tengamos esperanza, todo seguirá su curso. Esperanza, por encima y antes de todo lo demás; la única pregunta es, ¿cómo la encontramos? He aquí algunas claves.
Los expertos han descubierto, con los años, cuál es el mínimo absoluto para conservar la esperanza. Y es simplemente este: la esperanza depende de asegurarse que tenemos al menos dos alternativas, en todas las situaciones en las que nos encontremos y en cada tarea a la que nos enfrentemos.
Así, no debemos tener…
- solo una manera de describirnos a nosotros mismos, sino dos por lo menos;
- una manera de orientarnos hacia una carrera profesional, sino hacia dos por lo menos;
- una manera de buscar trabajo, sino dos por lo menos;
- una manera de buscar un trabajo, sino dos por lo menos;
- una oferta de trabajo únicamente, sino dos por lo menos.
Tener un solo plan, una sola opción, es la receta más segura para la desesperación. En un estudio realizado sobre 100 personas que buscaban trabajo utilizando un único método, unas 51 abandonaban su búsqueda al segundo mes. Habían perdido la esperanza. En cambio, de 100 personas que utilizaban dos o más maneras distintas de encontrar trabajo, normalmente solo 31 abandonaban la búsqueda al segundo mes.
En cualquier situación, es importante saber que, por mucho que tengas la sensación de estar a merced de poderosas fuerzas externas que escapan totalmente a tu control, siempre podrás encontrar algo, por muy pequeño que sea, que sí esté bajo tu control y con lo que puedes empezar a trabajar.
Eso es aplicable a cualquier momento en que estés sin empleo, en especial si la situación se alarga. Buena parte de la situación a la que te enfrentas queda fuera de tu control. No hay nada que puedas hacer por cambiarla. Pero esta proporción no puede ser del 100 %. Tiene que haber alguna parte de la situación —aunque sea solo un 2 %— que esté bajo tu control. Debes buscar cuál es y luego dedicar todas tus energías a trabajar en ella.
Por todo ello, antes de poder responder a la pregunta de “¿Qué hago a partir de ahora con mi vida?”, debes tener esperanza. Debes creer que tus acciones marcan una diferencia, que no te enfrentas a enormes fuerzas inmutables ante las que estás totalmente indefenso.